Un Frenchie que agrede a otros congéneres tiene un problema de conducta, este comportamiento se tiene que corregir cuanto antes. Las consecuencias de este problema pueden ser graves, ya que este tipo de conductas con otros perros, también se pueden trasladar hacia las personas.
Las mordeduras de un perro, además, pueden provocar graves heridas. Por ello, es importante abordar este problema de conducta cuanto antes. Estos son los primeros cuatro pasos que debe dar un dueño con un perro que agrede a otros:
La razón por la que el frenchie tiene encontronazos con otros perros es clave para poder abordar este problema de conducta. Por lo general, «las razones por las que está provocada la agresividad del perro con otros congéneres son una socialización incorrecta, la territorialidad, una posición jerárquica incorrecta del can en el grupo familiar, la falta de normas en casa para el perro, así como un carácter demasiado dominante», explica Gregorio Sánchez, educador canino.
Las situaciones mencionadas se refieren a cachorros que no se han relacionado con sus congéneres lo suficiente y, en consecuencia, no han aprendido las pautas de comportamiento canino. Pero también a perros que son muy posesivos con lo que consideran su territorio (casa, dueños).
Otros perros pelean por estar en lo alto de la jerarquía de su grupo familiar (dueños, otros perros), por tratar de imponerse a otros perros o porque quieren ser los líderes.
Las órdenes como «sit, sienta, quieto o tumbado» son de gran ayuda para controlar al bulldog cuando se encuentra con sus congeneres en la calle. Sánchez explica la forma de actuar en este sentido. «Cuando otro perro se acerca, es el momento de dar la orden al can conflictivo para que se tumbe; de esta manera, aprende a estar relajado ante la presencia de otro animal», aconseja este educador.
Lo idóneo es conseguir que ambos perros logren pasear juntos. Y que el animal con el problema de conducta tolere, de manera paulatina, la relación con otros canes en la calle. Si el perro asocia la interacción con otros canes con experiencias positivas, su conducta agresiva desaparecerá de forma gradual.
El hecho de no enfrentarse a la presencia de otros perros para evitar encontronazos no soluciona el problema y es uno de los hechos por los cuales se puede agravar este comportamiento, por la tension innecesaria que se hace sufrir al animal, cada vez que veas a un perro. «Un perro que agrede a otros congéneres puede hacerlo también con sus dueños», afirma Sánchez.
Por ello, es recomendable tomar medidas cuanto antes, para solucionar el problema de conducta.
La conducta agresiva del perro con otros canes es de las situaciones que suele necesitar la intervención del experto en comportamiento canino.
El entrenamiento de un frenchie con problemas de agresividad hacia otros congéneres puede tardar entre tres y seis meses, según el caso. Para obtener resultados satisfactorios, es imprescindible que los dueños participen de manera activa en el proceso de educación.
Artículo de Carolina Pinedo (consumer.es)